Si eres un fanático de las flores de jazmín, entonces querrás saberlo todo sobre cómo cuidarlas para que crezcan y florezcan maravillosamente. En esta entrada del blog, hablaremos de todo lo que hay que saber sobre la fertilización de las plantas de jazmín, desde cuándo y cómo hacerlo hasta las diferentes proporciones de NPK que puedes elegir. Siguiendo estas pautas, podrás ayudar a tus plantas de jazmín a prosperar y florecer durante muchas temporadas.
¿Qué es el jazmín?
El jazmín es un género de plantas con flores de la familia del olivo. Comprende unas 190 especies de arbustos, enredaderas y pequeños árboles. Las flores de jazmín son blancas o amarillas y tienen una dulce fragancia. Se utilizan mucho en perfumería, cosmética y aromaterapia. El jazmín también es una planta comestible; las flores y las hojas se utilizan para hacer té de jazmín.
La planta del jazmín es originaria de las regiones tropicales y subtropicales de Asia, África y Australia. Se ha introducido en otras partes del mundo y ahora se cultiva comercialmente en muchos países.
El jazmín es una planta de jardín muy popular porque florece durante todo el año y tiene flores fragantes. Puede cultivarse como arbusto o enredadera, dependiendo de las condiciones de cultivo. El jazmín también se utiliza como planta de interior.
Las plantas de jazmín necesitan un suelo bien drenado y pleno sol para florecer bien. Pueden cultivarse en macetas o en el suelo. La planta de jazmín necesita ser regada y abonada con regularidad para un mejor crecimiento.
¿Cuáles son las ventajas de abonar el jazmín?
Abonar su jazmín le ayudará a crecer más grande, más fuerte y más sano. Abonando su planta podrá aumentar el rendimiento y mejorar la salud general de la planta. La fertilización también ayuda a las plantas a resistir las plagas y las enfermedades.
Un jazmín bien alimentado es un jazmín hermoso. No sólo verá una mejora en el tamaño y la salud, sino también en el rendimiento de la floración. Abone a menudo para obtener los mejores resultados.
¿Qué proporción de NPK elegir?
Una de las decisiones más importantes que tendrá que tomar al fertilizar el jazmín es elegir la proporción correcta de NPK. Los tres números representan el nitrógeno (N), el fósforo (P) y el potasio (K) y cada uno desempeña un papel importante en el crecimiento de la planta. Un abono 20-20-20, por ejemplo, contiene una mezcla equilibrada de estos nutrientes.
Si tu suelo ya es rico en alguno de estos minerales, puedes elegir un abono de menor proporción o incluso complementarlo con materia orgánica, como el compost, para evitar sobrecargar de nutrientes a tus plantas. Como siempre, consulta con el profesional de tu centro de jardinería local para encontrar la mejor opción para tus condiciones de cultivo específicas.
¿Cuándo hay que abonar el jazmín?
El mejor momento para abonar el jazmín es a principios de la primavera, antes de que comience el nuevo crecimiento. También se puede abonar más adelante en el verano, una vez terminada la floración. Evite fertilizar durante el otoño y el invierno, ya que esto podría promover un crecimiento excesivo y conducir a plantas débiles cuando llegue el invierno.
Si no estás seguro de cuándo fue la última vez que fertilizaste tu planta de jazmín, o si hace tiempo que no recibe ningún nutriente, realiza primero un análisis del suelo. Esto le ayudará a determinar la cantidad de abono para jazmín que debe utilizar y el tipo de abono que sería más beneficioso para su planta.
¿Cómo abonar el jazmín?
Puedes utilizar abonos orgánicos o sintéticos para este fin. Si eliges utilizar abonos orgánicos, asegúrate de que sean de liberación lenta para que los nutrientes se liberen gradualmente con el tiempo. Los fertilizantes sintéticos suelen venir en forma líquida, y debes diluirlos según las instrucciones del envase antes de aplicarlos a tus plantas. Asegúrate de regar bien tus plantas antes de abonarlas; esto ayudará a que el abono para la planta de jazmín sea más eficaz.
Aplica el abono alrededor de la base de la planta, con cuidado de que no caiga en las hojas; si lo haces, puede hacer que se quemen. También debes evitar el exceso de abono, ya que puede dañar la planta.