Los perales son uno de los tipos de árboles frutales más comunes en Norteamérica. También son uno de los más fáciles de cultivar, por lo que son tan populares. Aquí hay algunas cosas que hay que saber sobre la fertilización de los perales, incluyendo cuándo y cómo fertilizarlos, la mejor guía de alimentación, qué fertilizante para perales elegir entre otros consejos para el cuidado del peral.
¿Cuáles son los beneficios de utilizar abono en mi peral?
Si está buscando una forma de sacar el máximo partido a su árbol, el abono es una excelente opción. Los fertilizantes pueden hacer maravillas cuando se trata de cultivar frutas y verduras, así que ¿por qué no iban a ser útiles en lo que respecta a los árboles? Algunos beneficios incluyen:
Más fruta – Al usar fertilizantes ayudamos a fortalecer nuestros árboles, lo que les ayuda a producir más fruta que antes. Así que si lo que quieres son peras más grandes, ésta puede ser la solución. Unas raíces más fuertes también conllevan menos problemas de enfermedades y plagas, lo que significa no sólo que su peral crecerá más sano, sino que también podría obtener mayores rendimientos en cada cosecha. La última ventaja es que un suelo rico en nutrientes puede garantizar que toda esa deliciosa fruta esté repleta de sabor.
¿Cuándo y cómo abonar los perales?
El mejor momento para abonar los perales es a principios de la primavera, antes de que comience el nuevo crecimiento. Sin embargo, también se puede abonar más adelante en la temporada, siempre que sea antes de las primeras heladas.
Hay muchas formas diferentes de abonar los perales, pero lo más importante es elegir un abono que tenga una proporción NPK equilibrada (que contenga nitrógeno, fósforo y potasio). Una fórmula 20-20-20 es ideal para los perales. Asegúrate de seguir cuidadosamente las instrucciones del envase al aplicar el fertilizante.
No apliques nunca demasiado abono de una vez, ya que podrías dañar las raíces de tu árbol. En su lugar, divide la cantidad recomendada en varias aplicaciones a lo largo del año. Puedes esparcir el abono alrededor de la base del árbol a finales del invierno o principios de la primavera, o mezclarlo con la tierra y el mantillo cuando lo apliques en el hoyo de plantación.
Cuotas de aplicación de fertilizantes
La cantidad de abono que deberá aplicar variará en función del tamaño y la edad de su árbol, así como del tipo de abono que utilice. En general, los árboles más jóvenes deben ser abonados con una dosis menor de nitrógeno que los más viejos. Una buena regla general es aplicar 0,25 libras de nitrógeno real por año de edad para los árboles jóvenes, hasta una tasa de aplicación máxima de dos libras por año. Para los árboles maduros, la tasa de aplicación recomendada es de una libra por año.
El nitrógeno no es el único nutriente que necesitan los perales; también necesitan fósforo y potasio. El fósforo contribuye al desarrollo de las raíces, mientras que el potasio ayuda a mejorar la calidad de la fruta y la resistencia a las enfermedades.
Consejos para mantener los perales sanos
- Coloca un buen mantillo en tu peral para que el agua se mantenga y las malas hierbas no entren en la zona de las raíces. El acolchado debe comenzar en el momento de plantar los perales o justo después si los acabas de trasplantar desde otro lugar.
- Mantén la tierra húmeda en todo momento.
- El exceso de riego es tan malo como la falta de riego, así que asegúrese de utilizar un pluviómetro y regar en consecuencia durante los meses secos.
- Asegúrese de plantar los árboles a pleno sol para obtener la máxima producción de fruta. Necesitan entre 12 y 15 horas de sol al día, lo que puede ser difícil si se tiene en cuenta lo rápido que crecen. Para garantizar el éxito a largo plazo de este árbol, manténgalo en un lugar donde reciba mucha luz solar directa durante toda su vida.
- La fertilización de los perales puede ser una de las mejores maneras de asegurar una cosecha abundante.