Si quieres que tus pensamientos estén sanos y florezcan durante toda la temporada, la fertilización adecuada es la clave. Pero con tantos tipos diferentes de fertilizantes para pensamientos en el mercado, puede ser difícil saber cuál elegir. En este artículo, hablaremos de cuándo y cómo fertilizar los pensamientos, así como de las diferentes proporciones de NPK que puedes buscar al comprar un fertilizante.
¿Qué son los pensamientos?
Los pensamientos son un tipo de flor que se utiliza normalmente con fines ornamentales. Vienen en una variedad de colores y se pueden encontrar tanto en jardines interiores como exteriores.
La palabra «pensamiento» deriva de la palabra francesa «pensee», que significa pensamiento o recuerdo. Esto se debe probablemente al hecho de que los pensamientos suelen tener marcas en sus pétalos que recuerdan a rostros humanos.
Los pensamientos se introdujeron por primera vez en Europa en el siglo XVI, y desde entonces son muy populares. En la actualidad, siguen siendo una de las flores más cultivadas en todo el mundo.
¿Qué se necesita para el mejor crecimiento de los pensamientos?
La fertilización de los pensamientos es uno de los componentes clave para garantizar su mejor crecimiento. Como cualquier otra planta, los pensamientos necesitan los nutrientes adecuados para crecer y florecer. Abonando tus plantas con regularidad, te asegurarás de que reciben el alimento que necesitan para alcanzar su máximo potencial.
¿Qué proporción de NPK debe elegir para los pensamientos?
La proporción de NPK para las flores de pensamiento puede variar, pero la mayoría de los jardineros recomiendan un fertilizante con alto contenido en nitrógeno y fósforo. Una fórmula 20-20-20 es ideal para este tipo de plantas. Asegúrate de leer la etiqueta del abono que has elegido para comprobar que estas cifras están incluidas. Si no lo están, elija un producto que se acerque a esta proporción. Los pensamientos necesitan mucho fósforo para florecer bien y producir colores vivos. El nitrógeno ayudará a mantener las plantas sanas y verdes, mientras que el potasio ayuda a mejorar la producción general de flores.
¿Cuándo y cómo abonar los pensamientos?
El mejor momento para abonar los pensamientos es a principios de la primavera, antes de que comience el nuevo crecimiento. También puede abonarlos en otoño, después de que hayan florecido y perdido sus flores. Asegúrese de utilizar un fertilizante de liberación lenta para que los nutrientes se liberen gradualmente con el tiempo.
La cantidad de abono que debes utilizar variará en función del tipo de abono que elijas. Por ejemplo, si utilizas un concentrado líquido, tendrás que diluirlo según las instrucciones del envase. Sin embargo, en términos generales, se recomienda utilizar aproximadamente ¼ de cucharadita de fertilizante por cada galón de agua. Vierte esta mezcla alrededor de la base de tus plantas y riega a fondo.