Si quieres añadir unas deliciosas y nutritivas grosellas a tu jardín, tendrás que saber cómo abonarlas correctamente. En esta entrada del blog, hablaremos de todo lo que necesitas saber sobre el abono de las grosellas, incluyendo cuándo y cómo hacerlo, qué tipo de abono utilizar y mucho más.
¿Qué son las grosellas?
Las grosellas espinosas son una fruta que suele utilizarse en mermeladas y pasteles. Son ricas en antioxidantes y tienen muchos beneficios para la salud, entre ellos
- fortalecer el sistema inmunitario
- reducir los niveles de colesterol
- prevenir el cáncer. De hecho, se ha demostrado que son eficaces contra las células del cáncer de mama.
Estas bayas crecen en arbustos o árboles altos, por lo que son fáciles de ver en cualquier jardín.
¿Cuáles son las mejores condiciones para el crecimiento de las grosellas?
La grosella espinosa necesita muchos nutrientes para crecer y producir frutos deliciosos. Por eso es importante seleccionar la proporción correcta de NPK para su planta de grosella espinosa en función de su zona de crecimiento. Las mejores condiciones para el crecimiento de la grosella espinosa son
- La temperatura del suelo debe estar entre los 18°C (65°F) y los 29°C (85°F). También puede tolerar temperaturas de hasta 50 °F (-15 °C), pero es posible que no florezca o fructifique tan bien en estos períodos fríos;
- El nivel de pH debe oscilar entre ligeramente ácido, con un pH=0, y moderadamente alcalino, con un pH=14;
- Las necesidades de agua dependerán del tipo de planta que tenga, así que asegúrese de regar regularmente, pero no demasiado;
- Las plantas de grosella necesitan pleno sol (al menos seis horas al día) para una buena producción de frutos.
¿Cuáles son las ventajas de abonar las grosellas?
Abonar las grosellas tiene muchas ventajas. Una alimentación adecuada puede ayudar a aumentar el rendimiento, mejorar la calidad de la fruta y reforzar la salud general de las plantas. Abonar en el momento adecuado también puede ayudar a prevenir problemas comunes como la podredumbre de la flor y la quemadura de las hojas.
La elección del abono adecuado es importante para obtener los mejores resultados. Hay una gran variedad de proporciones de NPK disponibles, por lo que es importante seleccionar una que se ajuste a las necesidades de sus plantas. Consulte con su centro de jardinería local para que le aconsejen qué tipo de abono es el mejor para sus plantas de grosella.
¿Qué abono es el mejor para las grosellas?
Hay muchos tipos de abono en el mercado, pero es importante elegir el que mejor se adapte a tus necesidades específicas. En el caso de las grosellas, debes buscar un abono que tenga una proporción NPK de 12-12-12. Esto proporcionará a tus plantas todos los nutrientes que necesitan para prosperar.
Si buscas una opción orgánica, considera el uso de compost o estiércol. Éstos añadirán nutrientes a tu suelo y ayudarán a mejorar su estructura con el tiempo. También es importante que te asegures de que el abono no contiene productos químicos ni pesticidas perjudiciales antes de aplicarlo a tus plantas.
¿Cuándo y cómo abonar las grosellas?
En primer lugar, debes averiguar el tipo de suelo que tienes. Las grosellas prefieren un pH del suelo de alrededor de seis. Si tu suelo es demasiado ácido o alcalino, modifícalo antes de plantar utilizando materia orgánica como compost o musgo de turba.
A continuación, decide cuándo y cómo abonar. Una regla general es abonar dos veces al año: una a principios de la primavera, justo cuando las yemas empiezan a hincharse, y otra a mediados del verano, cuando los frutos ya han cuajado. Para ambas aplicaciones, utilice un fertilizante equilibrado con una proporción N-P-K de 12-12-12 o algo similar. Distribuya el abono de forma uniforme por todo el parterre, y luego remuévalo con cuidado y riéguelo bien. De este modo, te asegurarás de que tus plantas tengan un comienzo saludable y produzcan muchas bayas a lo largo de la temporada.